Aprender a sentir nuestras emociones y escuchar nuestra sensación interior es fundamental para nuestra salud emocional y mental. Muchas veces, ignoramos estas señales, especialmente si son emociones negativas, y las reprimimos o las evitamos en lugar de confrontarlas y procesarlas.
Sin embargo, al hacer esto, solo estamos reprimiendo estas emociones, lo que puede llevar a una acumulación de estrés y tensión emocional que eventualmente puede causar problemas de salud física y mental. Además, al reprimir estas emociones, también estamos evitando enfrentar los problemas subyacentes que las causan.
A menudo, estas emociones son el resultado de heridas emocionales que se originaron en nuestra infancia y se han mantenido sin resolver hasta ahora. Al escuchar nuestro cuerpo y nuestras emociones, podemos comenzar a sanar estas heridas y liberarnos de los patrones y lazos emocionales que nos impiden avanzar.
Además, al amar y escuchar a nuestro niño interior, podemos conectarnos con nuestra verdadera esencia y permitirnos ser auténticos. Al hacerlo, podemos soltar las capas de armadura y defensa que hemos construido a lo largo de los años y abrirnos a la vulnerabilidad y la verdadera conexión emocional con los demás.
Aprender a sentir nuestras emociones y escuchar nuestra sensación interior es esencial para nuestra salud y bienestar emocional y mental. Al hacerlo, podemos liberarnos de las heridas emocionales del pasado.
Para empezar a conectar contigo puede probar a meditar:
La meditación es una práctica que consiste en enfocar la atención de forma intencional en un objeto o actividad, como la respiración, un mantra o una visualización, con el objetivo de alcanzar un estado de calma y claridad mental.
Puedes seguir los siguientes pasos:
1 Encuentra un lugar tranquilo y sin distracciones donde puedas sentarte durante al menos 10 minutos.
2 Siéntate en una silla con los pies en el suelo o en un cojín de meditación en el suelo con las piernas cruzadas.
3 Cierra los ojos o mantén una mirada suave hacia abajo. Respira profundamente varias veces, inhalando y exhalando por la nariz.
Consejo de concentración Para que puedas centrarte en la respiración puedes contar de 40 a 0.
Inhala y exhala 40
Inhala y exhala 39 … Y así hasta cero. No importa que te vengan pensamientos, simplemente déjalos pasar y sigue contando.
4 Al finalizar, date las gracias y dite lo mucho que te quieres.
Si te gustaría focalizar y meditar conmigo, ¡escríbeme!