Para la meditación guiada te voy a pedir que busques un lugar en tu casa, o en la naturaleza, que sea tranquilo y donde puedas estar cómodo sin interrupciones.
Puedes sentarte en una silla, en el suelo o, si lo prefieres, recostarte en posición Savasana: túmbate boca arriba, separa las piernas y separa también los brazos, con las palmas de las manos
hacia arriba.
Usa ropa cómoda y suelta que no te oprima y que te permita
respirar con tranquilidad.