Ejercicio para aprender a practicar la autocompasión y la amabilidad hacia uno mismo
La respiración consciente es una técnica de meditación simple que puede ayudarte a reducir el estrés y la ansiedad, y mejorar tu concentración y enfoque. Aquí tienes algunos pasos para
practicarla:
♦ Encuentra un lugar tranquilo y cómodo donde puedas sentarte
o acostarte sin distracciones.
♦ Cierra los ojos y toma unas respiraciones profundas y lentas
para ayudarte a relajarte.
♦ Comienza a respirar por la nariz y exhala lentamente por la
boca. Trata de hacer cada inhalación y exhalación lo más lenta y
suavemente posible.
♦ Concéntrate en la sensación de tu respiración mientras entra y
sale de tu cuerpo. Si te distraes con pensamientos, simplemente
vuelve suavemente tu atención a tu respiración.
♦ Continúa respirando de esta manera durante unos minutos,
permitiendo que tu mente se calme y se centre en la respiración.
♦ Si te resulta útil, puedes contar tus respiraciones mentalmente.
Inhala lentamente contando hasta cuatro, y exhala lentamente
contando hasta cuatro.
♦ Repite este proceso durante varios minutos.
♦ Cuando estés listo para terminar la práctica, toma algunas
respiraciones profundas y lentas, y permite que tu respiración
vuelva a su ritmo normal
Mi niño interior Laura Vega – parte 3
